En esta instancia de parcial de la materia Tendencias del Diseño Contemporáneo se nos pide que ejemplifiquemos, describamos y comentemos cómo se ha visto afectado el rol del diseñador con la nueva normalidad. 

 

Luego de escribir un breve relato sobre las cuatro charlas que tuvimos a lo largo del comienzo de la materia me pongo a analizar, cuestionarme y pensar sobre lo planeado y llegar a la conclusión de que puedo resaltar un aspecto de cada orador en relación al tema. Es decir, siento que los mensajes de las charlas fueron infinitos, fueron motivadores en todo sentido. Siento que los testimonios de estos cuatro (me tomo el atrevimiento de llamarlos) maestros me fueron más que útiles, fue inspirador. Tengo la certeza que los puedo llamar maestros porque cada uno vino a enseñarnos sobre lo aprendido gracias a su larga experiencia, cada uno a su manera; haciendo cada uno de los seminarios distintos y entretenidos. 

 

Para empezar voy con la charla de Juan Ciapessoni, siendo así el primer orador en orden cronológico. La experiencia de Juan nos deja en evidencia como en los últimos tiempos la tecnologia tiene una gran participación en el proceso de diseño de un profesional. Pero, en la nueva normalidad este uso de tecnología se vuelve exagerado. ¿Por qué exagerado? Exagerado porque es de las herramientas más importantes que tenemos en casa. Es aquella herramienta que se hace partícipe en todos los pasos del desarrollo de un producto; un producto que sea un prenda indumentaria, una página web, un logo o un video para una marca especifica, un mueble. A lo que voy es que como estudiantes todos sabemos lo importante que es la tecnologia en nuestra carrera estudiantil; pero con la nueva normalidad pasa a ser mucho más importante que antes. Es nuestra forma de hacer conocer nuestro producto, investigar sobre el mismo, hasta desarrollarlo. La computadora e internet se han convertido en un mundo de diseño aparte. ¿Como que un mundo aparte, Tini? Se estarán preguntando. Si, un mundo aparte. El semestre pasado tuve la oportunidad de aprobar una materia como Indumentaria III gracias a la computadora. El proceso de diseño se vio acotado a lo que es el mundo exterior y gracias a lo aprendido, puedo manejarme con lo que tengo en casa para crear. Lo que lleva a la charla de Carol Garcia, quien creó su exitoso emprendimiento con lo que tenía a sus alrededores completamente encerrada en Brasil. ¿Se acuerdan de The Flower Punchers? Bueno, es un claro ejemplo de cómo el rol del diseñador se tuvo que adaptar (como todos los otros profesionales que se vieron afectados por esta pandemia, que como bien sabemos afectó a todos los rubros). Carol se adaptó y comenzó a crear desde su casa, literalmente de lo que tenía en su jardín. En lo personal, casi siempre comienzo el proceso de diseño con una idea en la cabeza, la cual implica el salir a buscar los materiales para llevarlos a cabo. Con la nueva normalidad eso no fue posible. Los diseñadores se inspiraron en la pandemia o en la cuarentena porque era lo que los rodeaba, los agobiaba y lo que sentían permanentemente; y como artistas debemos expresarlo. ¿Les cuento una anécdota graciosa? En la materia del semestre pasado anteriormente mencionada (que fue completamente online) me inspire en una lechuga para hacer una prenda indumentaria. Muy loco, ¿no? En una lechuga. Y no saben lo buena que quedo! Me vi limitada a los materiales que por suerte ya tenía, pero eso me llevó a abrir aún más la cabeza como diseñadora. ¿Que puedo inventar con lo que tengo a mi alcance? Me pasó de tener ideas para crear el producto final pero no poder hacerlo tal cual yo quería por no poder salir a comprar los materiales necesarios. Tuve que experimentar sobre cuáles eran las distintas opciones que tenía para hacerlo con lo que tenía enfrente. El resultado fue mucho más positivo del que pensaba. Puedo decir que valoré mucho más mi proceso de diseño con la nueva normalidad que antes. Fue todo un desafío. Al tener que rebuscarme para lograr un resultado acorde al nivel de una materia como tal me sorprendí más de una vez. Porque sinceramente, no todas mis ideas eran buenas, a veces eran las más lógicas o simples, o hasta “chotas” como dijo Alfredo en su charla. Nos contó que de las ideas más chotas salen proyectos muy interesantes, como lo es Ghierra Intendente. 

Alfredo en su charla utilizó la palabra amistad para definir este proyecto; y con ella un gran mensaje. La fusión de los diferentes rubros de nuestros amigos como profesionales pueden ser la combinación perfecta para expresar lo que estamos buscando. El hecho de buscar lo que tenemos a nuestro alcance también abarca este tipo de ejemplos. Lo que me lleva de nuevo al seminario de Carol, que en su comienzo del emprendimiento basado en hacer estampas con el jugo de las flores era simplemente eso. Con lo que Carol sabía hacer. Pero la idea les pareció genial a artistas que lo vieron por internet desde sus casas en distintos países, que ellos mismos comenzaron a “meter cuchara” en The Flower Punchers y así creció y se convirtió en lo que es hoy. El complemento de muchas cabezas puede generar algo asombroso. Esto me hace darme cuenta que de verdad no hay límites para crear y diseñar. Me hace acordar a lo que contó Gabriela Pallares sobre su emprendimiento de Design Cities. Diseñó un proyecto que incluye a muchas ciudades en el mundo. Siento que ella también dejó su huella en mi cuando menciono que no está todo inventado. Tomó la frase prestada de Juan Ciappesoni cuando dijo: “estamos para cosas más grandes”. 

¿A que voy con todo esto?

La nueva normalidad vino a sacudir a los diseñadores. Vino a ampliar nuestra cabeza, nuestros campos de trabajo, nuestras limitaciones y nuestros desafíos. Algo que era inimaginable, abrirnos más de lo que ya somos, (como diseñadores somos personas creativas, que miran más allá de las simples cosas para inspirarse). Me resulta muy loco, el sentimiento de abrirnos más de lo que ya estábamos, no hablo por mi en este caso. Sino por mis profesores por ejemplo, son ellos quienes me enseñaron, enseñan y me van a seguir enseñando sobre el proceso de diseño. Me resulta loco que a ellos se les haya ampliado un nuevo mundo con esta nueva normalidad para diseñar. Un nuevo mundo que fusiona las combinaciones más alocadas con la tecnología, los distintos rubros y profesiones en distintos lugares geográficos y la sensación de infinidad en el diseño de un productos. 

 

Aquí debajo les muestro mis propios proyectos y productos de diseño que creé en esta nueva normalidad. Esos proyectos se vieron afectados (mejor dicho inspirados) en esta nueva normalidad. 

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La T-shirt inspirada en una lechuga; que como pueden ver hasta la "producción" de fotos fue con lo que tenia en casa, ja!

 

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